Hace unos días el gobernador solicitó unos días de vacaciones que la ley le permite como a cualquier empleado del Estado, el mismo que le fue concedido. Posteriormente, el propio gobernador solicita suspender sus vacaciones por la llegada del presidente de la República y para asistir a la cumbre PACA, pedido que fue rechazado por los consejeros. El día viernes, nuevamente en sesión de consejo, le rechazan el permiso para viajar a la ciudad de México y asistir a un evento muy importante sobre el medio ambiente con gastos pagados.
Si bien es cierto que los consejeros tienen el papel de fiscalizar la gestión regional, rol que dicho sea de paso deja mucho que desear, se supone que es su deber hacer todo lo posible para que la gestión sea exitosa o por lo menos no fracase. Para eso las autoridades deben hacer gestión del tipo de desarrollo, emprendimiento, negociación, etc., para el bien de nuestro departamento.
Se dice que el accionar de los consejeros sería mezquino, lo cual es una posibilidad y una segunda posibilidad es que sería por venganza contra Rubén Alva, porque al parecer no están satisfaciendo sus intereses personales. Lo único que demuestran con este accionar es que están traicionando los ideales por los cuales lucharon y juraron en busca del cambio por el bien de sus provincias.
Este tipo de actitudes y acciones solo lastiman a la gestión y por ende al departamento, porque si esta gestión fracasa significaría más atraso para Huánuco y todas sus provincias. Tanto el gobernador como los consejeros deben dejar de lado sus diferencias y actuar en bien de la población que los eligió, que merece todo el respeto, y más aún, que creen las bases para que este departamento se desarrolle y libere su tremendo potencial.
Que la visita del presidente Pedro Pablo Kuczynski sea una oportunidad para presentarle proyectos de desarrollo para cada una de las provincias, apóyense entre ustedes como una institución, aporten con algo bueno, busquen el diálogo y lleguen a buen puerto por el futuro de este departamento.
