La Municipalidad Provincial de Huánuco ha informado que clausurará el Mercado Modelo debido a sus graves deficiencias, tanto en infraestructura como en condiciones de higiene y seguridad. Sin embargo, hasta ahora no se ha anunciado una fecha concreta para esta medida. Mientras tanto, el desorden y la informalidad continúan siendo el panorama predominante en las calles aledañas, especialmente en una época crítica como las fiestas navideñas.
Las recientes supervisiones revelaron un cúmulo de problemas en el mercado: hacinamiento, instalaciones eléctricas peligrosas, ausencia de sistemas de emergencia como extintores y rutas de evacuación, y condiciones insalubres. Estas deficiencias, detectadas por la Gerencia de Bienestar de la municipalidad, ya habían sido notificadas a los responsables en noviembre. Pese a ello, no se tomaron medidas para subsanar las observaciones.
Mientras la municipalidad decide el momento exacto para proceder con el cierre, los comerciantes informales ya se han adelantado, ocupando las arterias cercanas al mercado. La venta de juguetes, ropa, panetones y otros productos de temporada se realiza en medio del caos y sin ningún tipo de regulación. Esto no solo afecta la imagen de la ciudad, sino que también complica la circulación vehicular y peatonal, especialmente en una época donde las calles deberían ser seguras y ordenadas para la población.
La falta de claridad en las acciones del municipio ha generado incertidumbre entre los comerciantes y compradores. Si bien es evidente que el Mercado Modelo requiere una intervención urgente, el retraso en la toma de decisiones solo agrava la situación. Es fundamental que el alcalde Antonio Jara y su equipo no solo cumplan con ordenar este emblemático espacio, sino que también presenten un plan concreto para reubicar a los trabajadores y garantizar que la población tenga acceso a un lugar seguro y adecuado para realizar sus compras.
El desorden actual refleja no solo la problemática del mercado, sino también la falta de planificación en el manejo de los espacios públicos. Huánuco necesita urgentemente una estrategia que permita modernizar su infraestructura comercial, pero sin afectar el sustento de cientos de familias. La Navidad, que debería ser una época de armonía y alegría, no debe convertirse en un escenario de caos e improvisación.
Es momento de que las autoridades actúen con firmeza y responsabilidad. La clausura del Mercado Modelo no debe ser solo un anuncio más; debe venir acompañada de soluciones reales y sostenibles para el beneficio de todos.
