Una serie de deudas que dejó la gestión de Jesús Giles siguen descubriéndose en el Municipio de Huánuco, que desde 2014, debe S/48 000 a la empresa NISA por raciones del Vaso de Leche, S/15 000 por hidróxido de calcio para el botadero, S/39 000 por vigilancia y S/27 000 por la implementación de la academia preuniversitaria.
Esto sigue perjudicando la administración de Aníbal Solórzano que tiene que pagar las deudas afectando la ejecución de obras o mejoramiento de los servicios. Tal fue la irresponsabilidad en la exgestión de Giles que dejó una multa de S/14 000 de trabajo porque los funcionarios no acudieron a una citación. “Es fácil hacer gestión con deudas. Nosotros estamos asumiendo estos pasivos”, reveló el administrador municipal, Joel Ortiz.
Seguridad y
vigilancia
Como si la comuna no tendría serenazgo y policía municipal, la gestión de Giles contrató en 2013 a la empresa Multiservice Draguer por S/83 100 por servicio de vigilancia para las instalaciones del camal municipal, almacén del PVL, estadio municipal y gerencia de Administración Tributaria durante 2014. Ahora, el representante de la empresa, José Regalado Nación, exige que le paguen S/39 241 que debe la comuna. Llama la atención si este servicio llegó a prestarse en los locales municipales.
PVL
Como si no tendrían presupuesto para pagar el Vaso de Leche, el gobierno de Giles dejó una deuda de S/48 000 a la empresa NISA por devengados que dejó en 2014. Ese año, cuando dejaba el gobierno, Giles revirtió dinero de Recursos Ordinarios destinados al PVL perjudicando a los beneficiarios y a la Municipalidad de Huánuco.
Academia
preuniversitaria
Uno de las banderas de campaña de Giles fue la academia preuniversitaria que inició en un año electoral cuando candidateaba a la presidencia regional. La MP-Hco. contrató por S/47 200 a la Corporación de Altos Estudios Educativos Edutran Perú por preparación preuniversitaria para 2014. Como acostumbraba, Giles no le canceló S/27 000 dejando la deuda a la gestión de Aníbal Solórzano. El actual administrador advirtió irregularidades: la orden de servicio no está firmada por el administrador de entonces.
Cal
La exgestión también dejó una deuda de S/15 000 por la compra de hidróxido de calcio para el tratamiento de la basura en el relleno sanitario de Chilipampa. Giles adquirió 36 000 kilos por S/31 000, pero no pagó S/15 000. La actual administración tiene que pagar esa deuda, de lo contrario, podría ser declarada omiso en el plan de incentivos.
El administrador informó que también arrastran una deuda por S/55 000 en combustibles y lubricantes, una multa laboral de S/14 000 porque los funcionarios faltaron a una citación. La gestión de Aníbal Solórzano, en 2015, tuvo que pagar más de S/200 000 por servicios de personal que dejó Giles en los 6 últimos meses, pero las deudas siguen apareciendo. Ortiz reiteró que estos pasivos limitan ejecutar más obras y mejorar los servicios a la población.