La noticia de la expulsión del congresista huanuqueño Luis Picón Quedo del partido Alianza Para el Progreso (APP), luego que el parlamentario haya sido visto en “amores” con Perú Libre, ha sido desestimada por la opinión pública y no ha tenido el eco que se merece.
Sin embargo, si analizamos un poco, podemos descifrar un patrón de comportamiento que nos puede decir mucho sobre este variopinto político que llegó al Congreso de la mano del partido de César Acuña.
Para empezar, Picón Quedó, poca veces comulgaba con el grupo político por el cual fue elegido, APP de César Acuña. En diferentes votaciones en el Pleno del Congreso, no se alineaba a las decisiones de su bancada, mejor dicho, Picón tenía su propia agenda. Y no necesariamente una agenda para beneficio de Huánuco, claro está.
Como lo ha informado su bancada, resultó traicionando los fines y objetivos del partido y los principios que tiene esta agrupación política. No obstante, no podemos insinuar de ninguna manera, que APP tenga sólidos valores, es más, hemos visto al mismo Acuña decir algo un día, y al día siguiente hacer totalmente lo opuesto. Pero, realmente eso no es lo importante, al menos en estos momentos.
Estamos hablando de cómo Luis Picón, pone sus intereses arriba de todo para lograr sus objetivos. Penosamente, estos objetivos son netamente personales y no departamentales, de los que se supone que debería de buscar. No se le ve realizando esfuerzo alguno por el bien de Huánuco. Es más, no se sabe que haya hecho algo hasta el momento por el departamento.
Sabemos que APP fue solo un vientre de alquiler para Picón, para poder llegar al congreso.
Entonces, estamos hablando de un personaje, que en primer lugar, es mal agradecido con el partido que lo ayudó a ser congresista, No demuestra tener muchos de dotes de lealtad, o probablemente ninguno. Mucho menos, que promueva alguna propuesta de Ley de su autoría, para buscar algún beneficio para esta región, y menos de fiscalización.
Solo hace notar su ambivalencia al alinearse en el grupo de poder de Castillo, demostrando claramente que sus intereses pueden ser muy influenciados por el mejor postor.
Posiblemente el hecho mismo de acompañar a la comitiva de Pedro Castillo hacia Chile, tal vez es la intención de Picón de ganarse la confianza de Castillo. Quien sabe, posiblemente esté buscando un ministerio o colocar a su gente de confianza en puestos “claves” en el aparato estatal.
Lo bueno que ya muchos en Huánuco lo conocen, es un congresista que ingresó por el partido de Alianza por El Progreso, pero terminó comulgando con Perú Libre, al menos por ahora.