La ejecución de la carretera Rancho–Umari–Chaglla–Rumichaca, vía clave para la articulación económica y social del distrito de Monzón, permanece estancada al no haberse formalizado aún la firma de contrato, según informó el alcalde Job Chávez Santiago.
Pese a la relevancia de este eje vial para facilitar el tránsito de productos agrícolas y el acceso a servicios básicos, no hay confirmación oficial por parte del gobierno regional sobre su adjudicación ni cronograma de inicio. El alcalde señaló que, mientras tanto, el municipio se ha visto obligado a asumir la mejora de las vías de acceso con maquinaria propia, y que se encuentran gestionando un convenio con el Ejército para ampliar la intervención en caminos rurales afectados por el invierno.
“El distrito de Monzón es extenso, con más de 60 caseríos y 12 centros poblados. Las necesidades de conectividad son urgentes”, indicó Chávez. En ese contexto, la falta de avances en la carretera Rancho–Umari–Chaglla–Rumichaca representa un obstáculo estructural para el desarrollo local, más aún cuando los desastres naturales han dejado caminos bloqueados y zonas agrícolas incomunicadas.
La situación se agrava con un presupuesto municipal limitado. Según el alcalde, reciben aproximadamente 500 mil soles mensuales, lo cual resulta insuficiente para atender la magnitud del territorio y sus necesidades viales.
Además del frente vial, Monzón también enfrenta retrasos en proyectos de agua, desagüe y salud, así como pérdidas agrícolas producto de huaicos y crecidas de ríos. Las gestiones para obtener apoyo humanitario y reactivar obras paralizadas continúan, pero no hay fechas concretas para soluciones definitivas.