María Auxiliadora Pereira.- La violencia contra la mujer es una epidemia que no solo abarca la violencia física y psicológica, sino también el acoso callejero, las agresiones sexuales y un largo listado de situaciones que marcan la vida de la mayoría de las mujeres.
En este sentido, Delia Chamorro, decana del Colegio de Psicólogos de Huánuco, señala que, en la actualidad, ocho de cada 10 mujeres sufre de violencia intrafamiliar.
“En Huánuco han aumentado un 60 % los casos de violencia en lo que va de año. Entre las causas encontramos que muchas veces son personas que durante su infancia vivieron en un ambiente familiar violento. Por ejemplo, en el caso del varón tiende a repetir este tipo de patrones o conductas, en el caso de la mujer comienza a ver esto como una normalidad”.
Chamorro destaca además que la tercera parte de los maltratos hacia la mujer se inicia durante la etapa del embarazo y el pos parto.
La violencia no ocurre de forma continua, sino en ciclos, más difícil de detener.
“La dependencia económica, el alcoholismo, las drogas y el estrés son algunas de las causas que pueden llevar a una pareja a caer en actos violentos, hay estudios donde mujeres maltratadas aseguran que la violencia comenzó en una etapa donde su agresor se sentía angustiado”.
Por su parte, Greisy Carolina González, psicóloga clínica bilingüe de la República de Trinidad y Tobago, afirma que los roles de géneros y las culturas son determinantes en los índices de violencia contra la mujer.
“Los roles dominantes tienden a ser un factor o predisposición al abuso, también tiene que ver la creencia de quien es la autoridad de la relación”.
Ciclos de la violencia
Greisy Carolina González, psicóloga clínica de Trinidad y Tobago.
González acota que la violencia no ocurre de forma continua, sino en ciclos, lo que lo vuelve aún más difícil de detener. Porque se dejan envolver perdiendo el control de sus actos.
“El ciclo de la violencia tiende a iniciar con una fase de tensión que genera impases entre la pareja. Ante determinadas situaciones, el hombre reacciona de manera desproporcionada creando en la víctima un sentimiento de culpa”.
Asimismo, añade que, en la segunda fase, se produce el estallido de la violencia donde el agresor libera toda la ira y la tensión acumulada.
“La agresión es realizada con la finalidad de castigar a la víctima, ya que el hombre entiende que la mujer tiene la culpa de su tensión por no haber accedido o sus imposiciones”.
Y la tercera fase, según Gonzales, es la reconciliación o luna de miel donde el hombre ejerce sus facultades de manipulación sobre la mujer mostrando un tipo de afecto para recuperar la confianza de la víctima.
Delia Chamorro, decana del Colegio de Psicólogos de Huánuco.
“En esta fase el agresor se muestra arrepentido, y realiza falsas promesas sobre que no volverá a suceder lo mismo y la víctima queda enganchada a esa luna de miel porque en esta fase el hombre se transforma en la pareja ideal”.
Cifras a nivel nacional
Según datos del Programa Nacional para la Prevención y Erradicación de la Violencia contra las mujeres, en lo que va del año 2020 se han atendido 61 705 casos, de los cuales 52 752 corresponde a mujeres violentadas y 8953 a hombres.
De igual manera, se dio a conocer que los casos de violencia sexual tienen mayor incidencia en los siguientes departamentos: Lima 871 casos, La Libertad 251 casos, Arequipa 148, Piura 132, Callao 127, Loreto 103 y Cajamarca 101 casos.
Tentativa de feminicidio
En cuanto a la tentativa de feminicidios, se pudo observar una disminución de un 41 %, en comparación al año pasado donde 317 mujeres estuvieron a punto de perder la vida en manos de sus parejas.
Entre las regiones con mayor número de casos de tentativa de feminicidio hasta el mes de septiembre resaltan: Lima Metropolitana con 71 casos, la Libertad (13), Ica (7), Junín (7), Callao (7), Cajamarca (7), Piura (6), Huánuco (5), Tumbes (5) y Lambayeque (5).
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