Una reflexión sobre la docencia universitaria

LA VOZ DE LA MUJER

“El docente universitario debe investigar para enseñar, y enseñar lo que investiga”

Escrito por Denesy Palacios Jimenez

Este siglo XXI, la pandemia mundial que vivimos, exigen de nuestras instituciones educativas universitarias el compromiso de la renovación, no solo en tecnología sino fundamentalmente en el rediseño de un nuevo ser, de un ciudadano comprometido, de un profesional ético en las tres dimensiones, es decir como profesional, como persona, y como docente. En los últimos años hemos visto los semilleros de doctores, como sucede en nuestra alma matter,que lastimosamente solo ha servido para abultar los CV de los profesionales para sus ascensos o mayores sueldos, y  lastimosamente en lugar de acercarnos a la calidad nos han alejado aún más, porque la identidad profesional está muy distante de ir acorde con la ética y moral profesional, y quizá una de las mayor debilidades de la SUNEDU, sea esta, me refiero en no saber fiscalizar para que se respete la meritocracia, prueba de ello es que vemos a docentes universitarios que con mucho esfuerzo han hecho doctorados en prestigiadas universidades y hasta postdoctorados, sin embargo por no ser cercanos a las autoridades universitarias, son excluidos de la carga académica en post grado; y más bien a magister, que son incondicionales al grupo de poder les dan cursos, y facilitan para que saquen su grado de .doctor, por supuesto con jurados y asesores amigos, sin ningún tipo de exigencia académica.

Y es que no olvidemos que la universidad, es una organización social, cultural y política que tiene como objetivo la formación profesional. De tal manera, que de ser una institución para la ilustración de los hombres en su comienzo se ha convertido en una organización que tiene que competir con otros entes en la formación cultural para acceder al campo laboral y procurar resolver al mismo tiempo los grandes dilemas de la humanidad en diferentes campos del saber, sacando a flote la justificación de la investigación, la docencia y gestión como procesos matrices de su valoración social y cultural entendiéndolos desde criterios de calidad (Pérez Gómez, 1998; Giddens, 2006) Zabalza (2002)

Sabemos que los docentes en el Perú y gran parte del mundo son profesionales, que vierten sus experiencias laborales, investigativas en el proceso de enseñanza-aprendizaje, in embargo en gran parte de nuestras universidades peruanas hay una precariedad enorme, porque los grados se obtienen teóricamente, y muchos sin experiencia laboral de su profesión pasan a ser docentes. Indiscutiblemente que el profesor universitario es un agente de la cultura, y un agente del cambio y la transformación que Huánuco y el país necesitan, para encontrar el ansiado desarrollo.

Esta pandemia nos ha hecho ver y desnudar la triste realidad, nos quedamos en la teoría, en el conocimiento repetitivo, hablamos de innovación porque sobre la marcha se quiere remplazar las clases presenciales por las virtuales, cuando no se está vinculando la cantidad de problemas sociales, económicos y hasta de salud física y mental que vive gran sector de la población, y por ende los integrantes de la comunidad universitaria.

Sin lugar a dudas, aun quedan docentes, que hacen de esta labor un apostolado, que no han sido contaminados por la corrupción y la ambición del enriquecimiento ilícito, sino que son conscientes del papel que deben jugar como agentes de cultura y de cambio, y que los alumnos saben y reconocen, porque su preocupación no solo es la formación profesional, sino la de formar ciudadanos que íntegramente se incorporen como sujetos activos de cambio. Es por eso que ser docente universitario es aquel intelectual profesional que cumple con la misión holística en la construcción, transmisión y transformación del conocimiento científico. Para brindar al ser humano la potestad de realizarse, dentro de la connotación ética y moral de su acción social, política y cultural.

¿que estamos haciendo por defender nuestra institución?, por la calidad educativa?, ¿y la transformación a la normalidad superior que demanda esta crisis?

Que este 11 de julio, día del docente universitario, nos sirva de reflexión, para todos