Tu voto vale más que un regalo

Por Jhon Apolinario

Recordando esta frase de Julio Anguita “Quien vota a los corruptos los legitima, los justifica y es tan responsable como ellos”. Reaparece en mi mente la tarea de escribir estas líneas a mis lectores de la semana.

El 26 de enero los peruanos tienen la tarea de volcar la democracia representativa hacia una democracia directa, también tienen la responsabilidad de votar consciente y sin compromisos.

Lo peor de todo es que en el lapso del periodo de campaña electoral se cruzan las fiestas decembrinas y a más de algún político ya le salió la tentación de andar jugando al “Santa Claus”, “gestionando” recursos para comprar regalitos y tratar de mercadear votos por dádivas en estas fechas.

Pueda que los peruanos, como pasa con frecuencia en América Latina, no tengamos suficientemente claro cuáles son específicamente el trabajo que se espera de un legislador; tampoco es que existan sistemas serios de evaluación del desempeño y resultados de los congresistas. Nos falta mucho como región para apostar a esos niveles de información, formación y madurez ciudadana.

Por eso, la apuesta de los partidos de siempre es la de siempre: comprar los votos y saturar hasta el hartazgo de imágenes con gente sonriente; de pintas de bardas a lo largo y ancho del país. No alcanzamos a ver que ese dinero solo puede tener dos orígenes: o lo saca el partido político de sus arcas, o los políticos organizan su “colecta” con personas adineradas que literalmente “invierten” a una “causa”: poner plata en la elección para recuperar en el periodo de gestión. Es una ecuación simple: invierten dinero que esperan recibir a cambio… pero con una gran tasa de interés, en perjuicio de los peruanos, en beneficio del “inversionista”.

Democracia Directa la Casita, reafirma su compromiso por el cambio estructural del sistema, con una nueva constitución vía referéndum.