Luego de 17 días de paro, la empresa comunal Rancas depuso su medida de fuerza iniciada el pasado 9 de febrero contra la minera Cerro SAC. Trascendió que lo obtenido por los manifestantes es lo que la minera habría ofrecido desde sus primeras reuniones.
La extensa paralización ha dejado pérdidas millonarias, principalmente para la empresa comunal. Se estima que Ecoserm Rancas habría dejado de ganar dos millones y medio de soles, responsabilidad directa que corresponde asumir a sus directivos Robert Robles, gerente de la empresa comunal, y Jaime Flores, presidente de la comunidad de Rancas.
Por otro lado, la medida también afectó a cien trabajadores de la planta de óxidos, quienes se han visto en la obligación de salir de vacaciones forzadas, además del personal de las empresas comunales de Quiulacocha, Yurajhuanca y contratistas que prestan servicios a Cerro SAC.
El costo y daño social como consecuencia de la paralización es alto, ya que cientos de trabajadores y sus familias se han visto perjudicadas al ser impedidos de ingresar a sus labores por los piquetes apostados cerca de la planta de óxidos, hechos que serán evaluados por la población y por los dirigentes comunales.