Tensión entre Ucrania e Irán por el envío de misiles balísticos a Rusia

Ucrania ha emitido una fuerte advertencia a Irán tras las informaciones sobre el supuesto suministro de misiles balísticos a Rusia, en medio del conflicto que continúa asolando el este europeo. El Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania convocó este lunes al encargado de negocios de Irán en Kiev, Shahryar Amuzeghar, para expresar su “profunda preocupación” y alertar sobre las consecuencias devastadoras que tendría esta cooperación militar en las relaciones bilaterales entre ambos países.

Según un comunicado oficial, el Gobierno ucraniano manifestó que la confirmación del suministro de misiles balísticos por parte de Irán podría derivar en consecuencias irreparables. La preocupación se centra en el reciente informe del Financial Times, que asegura que Irán habría enviado más de 200 misiles balísticos de corto alcance Fath-360 a Rusia. Estos proyectiles, con un alcance de 120 kilómetros, habrían llegado esta semana al mar Caspio y podrían ser utilizados por Rusia para atacar infraestructuras y ciudades ucranianas cercanas a la frontera.

Ucrania pide autorización para atacar depósitos rusos

Frente a este escenario, un alto funcionario ucraniano, Andrii Yermak, jefe de la oficina presidencial, instó a los países occidentales a permitir que Ucrania use las armas suministradas por ellos para destruir los almacenes donde Rusia guarda los misiles iraníes. Hasta ahora, las potencias occidentales han sido reticentes a autorizar ataques en territorio ruso, por temor a verse involucrados en un conflicto que se ha convertido en el más grande en Europa desde la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo, Yermak afirmó que la “protección no es una escalada” y que Ucrania debería tener el derecho de eliminar estas amenazas antes de que sean usadas para atacar su territorio.

Rusia ha sometido a Ucrania a repetidos ataques con misiles y drones de largo alcance desde el inicio de la guerra en febrero de 2022, lo que ha provocado la muerte de más de 10.000 civiles, según las Naciones Unidas, y paralizado gran parte de la infraestructura eléctrica del país. En respuesta, Ucrania ha lanzado incursiones en territorio ruso, como el reciente ataque en la región de Kursk.

Reacciones internacionales y negaciones

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, desestimó los informes sobre el envío de misiles iraníes, afirmando que «este tipo de información no siempre es cierta». Peskov destacó la relación “importante” entre Rusia e Irán, enfatizando la cooperación económica y diplomática entre ambos países.

Por su parte, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Irán, Nasser Kanaani, negó rotundamente que Teherán hubiera suministrado armas a Rusia, calificando las acusaciones como políticamente motivadas.

En paralelo, el director de la CIA, William Burns, advirtió sobre los crecientes lazos de cooperación en defensa entre Rusia, Irán, China y Corea del Norte, y calificó esta alianza como una amenaza tanto para Ucrania como para los intereses occidentales en Oriente Medio. Además, China, que ha sido un socio económico clave para Rusia durante la guerra, anunció ejercicios navales y aéreos conjuntos con Moscú, aumentando la preocupación sobre la profundidad de estas alianzas.