Se acentúa caos vehicular en Óvalo de Cayhuayna

La historia de nunca acabar. El Óvalo de Cayhuayna sigue siendo tierra de nadie y lugar donde el caos vehicular es grave y no hay autoridad que ponga orden o tome medidas para acabar con esta situación. Aproximadamente al mediodía de ayer, reporteros del diario AHORA demoraron más de un cuarto de hora para llegar desde el frontis de ingreso a la ciudad universitaria hasta la zona del colegio Juan Velasco Alvarado, por donde gigantescas colas de todas clase de vehículos pugnaban por avanzar sin respetar su carril ni los semáforos ubicados a lo largo de la vía.

La situación más difícil se produce en el frontis de la puerta principal de ingreso a la Unheval, que se ha convertido en paradero informal de colectivos y combis que esperan la salida de estudiantes y tapando completamente la vía en ambos sentidos y haciendo imposible pasar en horas punta.

Situación similar sucede en el óvalo, que es también paradero y terminal al aire libre de empresas que viajan a Lima, Huancayo y Pasco, que estacionan en plena pista sus buses y automóviles para llenar pasajeros. De igual modo, a lo largo de la vía desde el óvalo hasta el puente Huancachupa donde los vehículos avanzan a paso lento por la aglomeración.

No se observa autoridad municipal ni policial, ni siquiera haciendo acto de presencia, de tal manera que todo el mundo hace lo que quiere.