En un fallo resonante que reafirma el compromiso de la justicia con los más vulnerables, Fortunato Malpartida Huerta, rondero del centro poblado de Cachicoto, distrito de Monzón, ha sido condenado a pasar el resto de sus días tras las rejas. La decisión llega tras la confirmación de los jueces del Juzgado Penal Colegiado de Leoncio Prado y la Sala Mixta Supraprovincial de Leoncio Prado, quienes, tras un detallado análisis del caso, encontraron pruebas irrefutables de su culpabilidad en el abuso de una niña de apenas 7 años.
El caso, que se remonta a los meses de octubre y noviembre de 2019, ha causado conmoción y rechazo en la comunidad. La víctima, en un acto de coraje, reveló que fue llevada por la fuerza a la casa de Malpartida Huerta, quien aprovechó los momentos de soledad para cometer el abominable delito. La situación salió a la luz gracias a la hermana de la víctima, quien, al enterarse de los hechos, no dudó en informar a su madre y posteriormente a las autoridades, desencadenando una serie de eventos que culminaron en la condena del rondero.
A pesar de los intentos de Malpartida Huerta por desacreditar el testimonio de la menor, alegando manipulación por parte de su hermana, la firmeza de las pruebas presentadas fue suficiente para disipar cualquier duda razonable sobre su culpabilidad. El informe del médico legista, que confirmó signos de desfloración himeneal antigua, jugó un papel crucial en el veredicto.
Además de la condena penal, Malpartida Huerta ha sido sentenciado a pagar una suma de 15 mil soles en concepto de reparación civil a la víctima, un gesto que, si bien no puede compensar el daño irreparable sufrido, representa un paso hacia la justicia y la reparación.