El agente de seguridad Gilber Jaimes Laveriano (20) habría confesado ante la policía que golpeó brutalmente a su hijastro de 1 año y 8 meses de nacido, supuestamente porque lloraba mucho.La madre habría decidido callar por temor a que el sujeto la golpee.
El desnaturalizado también habría quemado las nalgas del bebé porque se orinó en el pantalón, luego sus incesantes llantos lo habrían enfurecido y lo atacó a golpes hasta matarlo.
Un testigo afirmó que Yesica Cerila Picón Eulogio (21), madre del infante, también era víctima de agresiones por parte de su conviviente y por miedo habría callado el terrible hecho. La pareja continúa detenida en la comisaría de Llata por una orden de detención preliminar.
Como se sabe, el bebé murió el viernes pasado en horas de la tarde, pocos minutos después de haber ingresado al centro de salud de la localidad de Pampas del Carmen, en el distrito de Llata, provincia de Huamalíes, a donde la llevó su madre, luego de haber sido golpeado salvajemente.
