Alianza Universidad en bajada. Una nueva derrota, la cuarta en sus últimos cinco partidos mientras el otro fue empate, expresan con claridad el bajón futbolístico que atraviesa y que preocupa porque significa que sigue bajando en la tabla de posiciones.
El partido de Huancayo fue una muestra de ello, una de los más discretos en los trece que lleva jugados en el Apertura, tanto colectiva como individualmente, con excepciones puntuales como Landauri quien estuvo en todas, buscó el arco, tuvo ocasiones claras y tuvo poco apoyo; aparte del trabajo siempre confiable del portero Morales, de Vílchez y del volante Morales.
El primer gol huancaíno, que no fue mejor, se produjo por un error defensivo de ambos laterales, el izquierdo que no supo bloquear el centro y el derecho que dejó libre a Manuel Corrales bien proyectado, que se acomodó y remató sin marca.
El segundo gol fue de penal de Carlos Neumann, que aparentemente no fue falta, pero que el árbitro, mal colocado, dio a indicación del asistente.
Lo cierto es que Alianza UDH está jugando mal y tal vez es momento que los dirigentes tomen cartas en el asunto.