La inteligencia artificial sigue avanzando a pasos agigantados, con nuevas herramientas que prometen revolucionar la forma en que interactuamos con la tecnología. El sector de la IA, que ha experimentado un crecimiento exponencial en los últimos años, se encuentra en un punto de inflexión gracias a modelos de razonamiento cada vez más sofisticados. Este desarrollo se produce en un contexto donde la inversión en IA a nivel global superó los 200.000 millones de dólares en 2024, según datos de IDC, y se espera que continúe creciendo a un ritmo acelerado.
Según la investigación publicada por The New York Times, OpenAI ha presentado dos nuevas versiones de su tecnología de razonamiento, denominadas OpenAI o3 y OpenAI o4-mini, capaces de procesar tanto imágenes como texto, abriendo un abanico de posibilidades en diversas aplicaciones.
Estas innovaciones permiten a los sistemas «manipular, recortar y transformar imágenes en función de la tarea a realizar», tal y como señaló Mark Chen, jefe de investigación de OpenAI, durante la presentación en línea. La capacidad de generar imágenes, realizar búsquedas en la web y utilizar otras herramientas digitales amplía significativamente el potencial de estas nuevas versiones, situándolas a la vanguardia de la IA.
A diferencia de las primeras versiones del chatbot ChatGPT, estos sistemas de razonamiento dedican un tiempo considerable a «pensar» sobre la pregunta antes de responder, priorizando la precisión sobre la inmediatez. Este cambio de enfoque refleja una evolución en la filosofía de desarrollo de la IA, buscando modelos más reflexivos y menos reactivos. Este proceso de deliberación interna, que simula la forma en que los humanos abordan la resolución de problemas, es un paso crucial hacia la creación de sistemas de IA más inteligentes y capaces.
Este desarrollo se enmarca dentro de un esfuerzo más amplio para construir una IA que pueda razonar a través de tareas complejas. Empresas como Google, Meta y DeepSeek, una startup china, también están trabajando en tecnologías similares, lo que demuestra la creciente competencia en este campo. El objetivo común es crear sistemas capaces de resolver problemas a través de una serie de pasos interconectados, replicando el proceso de razonamiento humano. Estas tecnologías podrían ser especialmente útiles para programadores, que podrían utilizarlas para acelerar el desarrollo de software.
Estos sistemas de razonamiento se basan en modelos lingüísticos de gran tamaño (LLM). Para construir estos sistemas, las empresas someten a los LLM a un proceso adicional denominado aprendizaje por refuerzo. Durante este proceso, el sistema aprende un comportamiento a través de extensas pruebas y errores. Por ejemplo, al trabajar en varios problemas matemáticos, se puede aprender qué métodos conducen a la respuesta correcta y cuáles no. Si se repite este proceso con un gran número de problemas, se pueden identificar patrones.
OpenAI también ha presentado una nueva herramienta, Codex CLI, diseñada para facilitar aún más las tareas de programación informática que implican sistemas como o3 y o4-mini. Esta herramienta, descrita como un agente de IA, permite utilizar estos sistemas de IA junto con el código existente almacenado en el ordenador personal de un programador. OpenAI ha decidido liberar el código fuente de esta herramienta, permitiendo a programadores y empresas modificar y construir sobre la tecnología.
A partir del miércoles, estos nuevos sistemas estarán disponibles para todos los suscriptores de ChatGPT Plus, un servicio de 20 dólares al mes, o ChatGPT Pro, un servicio de 200 dólares al mes que da acceso a todas las herramientas más recientes de la empresa. Aunque el acceso a la IA más avanzada tiene un costo, se espera que la disponibilidad generalizada de estas herramientas impulse la innovación y la adopción de la IA en diversas industrias. Es importante señalar que The New York Times ha demandado a OpenAI y a su socio, Microsoft, por infracción de los derechos de autor de los contenidos de noticias relacionados con los sistemas de IA, reclamaciones que ambas empresas han negado.
