Once obreros que fueron contratados indebidamente por la exgestión de Jesús Giles fueron repuestos en la Municipalidad de Huánuco por la administración de Aníbal Solórzano que acató la orden judicial que declaró fundada la medida cautelar de esos extrabajadores.
Los 11 trabajadores, que “ganaron” las plazas en un concurso plagado de vicios y observado por la Contraloría General de la República (CGR), retornaron a sus plazas de obreros. El alcalde Aníbal Solórzano informó que algunos se resisten a trabajar en sus plazas de origen como obreros de Parques y Jardines o Limpieza Pública.
La Mphco apeló la resolución del juzgado esperando que en segunda instancia se consideren los hallazgos de la CGR que detectaron numerosos vicios que acarrean la nulidad del supuesto concurso público que fabricaron Giles y compañía para favorecer con contratos indefinidos a sus allegados.
Solórzano indicó que el Poder Judicial debe dejar precedente y anular los contratos irregulares. “Si desconoce (los hallazgos de Contraloría) avala la ilegalidad, y todos van hacer lo que le da la gana. Debe dejar precedente para no hagan lo que les dé la gana en las instituciones públicas”, exigió.
