Denesy Palacios Jiménez (*) 3.4. 2019
“EL SER HUMANO ES LO QUE LA EDUCACIÓN HACE DE ÉL” (Alberto Contreras)
Damos la razón a Albert Camus, Premio Nobel en 1957, cuando al recibirlo hace alusión: “te lo agradezco a ti maestro”, pues aduce que la joya de la corona de un país es el maestro, ironías del destino, sabemos que los pueblos más avanzados y desarrollados, son precisamente los que remuneran mejor al maestro, porque valoran su esfuerzo, su dedicación su entrega, su responsabilidad y porque son maestros por vocación, porque “el ser humano es lo que la educación hace de él”, conforme lo asevera Alberto Eber Contreras Mariño.
En el Perú, nos llenamos la boca diciendo que se requiere una educación de calidad, pero esta no cae del cielo, sino que se requiere que se priorice la educación, lo cual significa empezar por asignar un mayor presupuesto para el sector, docentes mejor remunerados y se debe estimular más a aquellos que trabajan en zonas rurales alto andinas y amazónicas, en zonas fronterizas, puesto que el esfuerzo es mayor; sin embargo, a estas zonas, como castigo estamos enviando a los maestros o maestras que han sido tachados o que tienen algún proceso; entonces la brecha entre el mundo rural y urbano se hace mucho más grande. Por otra parte, es el ámbito rural el que requiere mayor atención, cómo es que permitimos que un solo docente asuma diversos grados, porque como la población es dispersa, existen pocos alumnos para grados distintos, entonces estamos priorizando la cantidad y no calidad.
También hay otro asunto de forma, antes hablar de la educación pública es hablar de mejores estudiantes, producto de mejores profesores, porque los estudiantes con bajo rendimiento, o, que se desaprobaron repetidamente, o que tenían mala conducta, iban a II. EE. particulares, hoy sucede casi a la inversa. Y esto tiene que ver con el tipo de maestros o maestras que tenemos, muchos de ellos sin vocación. Si recordamos a Mariátegui en su libro Temas de la Educación, que casi va a cumplir un siglo, manifiesta claramente que no se debe tomar como pretexto la falta de presupuesto, para no dar lo que debemos asumir con responsabilidad refiriéndose a la parte formativa educativa e instruccional.
Por otra parte, el enfoque de género no significa adoctrinamiento, la educación es para despertar en los alumnos la capacidad crítica, creativa, reflexiva, que no debe haber exclusión de ninguna naturaleza, sino que debemos ser tolerantes, y esto no se refiere a que seamos iguales, sino que se tiene que priorizar la dignidad humana, porque todos tenemos algo en común y eso es la raza humana, que se refiere a equidad, se refiere a dar cada uno las oportunidades, según nuestras capacidades, nuestros talentos, nuestras habilidades, nuestras inteligencias.
Finalmente diremos, que mucho daño ha hecho la politización en el país, de un enfoque clerical ortodoxo, a un enfoque populista, y postergamos lo principal que es la educación, y que esta debe ser para saber cómo triunfar en la vida, la libertad de decidir, y por supuesto la riqueza es fomentar valores, porque si nuestros niños y jóvenes no reciben en su hogar la parte formativa, ahí está el maestro para encaminarlo, porque no olvidemos que la ley más importante es la moral, el mejor abogado son los principios y el mejor juez la conciencia, y porque somos lo que somos por la capacidad plástica que tiene el cerebro y eso es lo que debemos fomentar en los estudiantes