La Unión se viste de tradición: Conmemoración masiva en el Día de los Difuntos

Desde Ripán hasta La Unión, se realizaron misas masivas en honor a los fieles difuntos

Por Keny Rosado. En la tradición del calendario eclesiástico, tras el 1 de noviembre, fecha en la que se conmemora el Día de Todos los Santos, se celebra el 2 de noviembre el Día de los Difuntos. Si bien estas fechas están íntimamente relacionadas en su esencia, que es la rememoración de seres queridos, ambas presentan diferencias claras en sus significados y prácticas.

El Día de Todos los Santos es una jornada en la que se honra tanto a los santos conocidos como a aquellos desconocidos. Aquellas personas no canonizadas, pero que, según las creencias, ya residen en presencia de Dios. En contraposición, el Día de los Difuntos se dedica al recuerdo de los cristianos bautizados que, al morir con alguna culpa de pecados menores en sus almas, aún no alcanzan la plena presencia divina. Según las doctrinas eclesiásticas, estas almas se encuentran en el Purgatorio, y el objetivo principal de esta fecha es orar por ellas, a fin de que alcancen la luz divina.

Según registros históricos, el Día de los Fieles Difuntos fue instituido en el año 998 por el monje benedictino San Odilón de Francia. Esta conmemoración, que se celebra el 2 de noviembre, fue posteriormente adoptada por Roma en el siglo XVI, extendiéndose así a lo largo y ancho de la comunidad católica mundial. La esencia de esta celebración radica en la firme creencia de que aquellas almas que al fallecer no han sido purificadas de pecados veniales, o que no han expiado transgresiones pasadas, no pueden acceder directamente a la Visión Beatífica. Sin embargo, los vivos pueden interceder por ellos a través de rezos y el sacrificio de la misa.

Este año, en La Unión, la celebración del Día de los Difuntos no ha sido la excepción. El cementerio local se llenó de ciudadanos que, con respeto y cariño, visitaron las tumbas de sus seres queridos. Las escenas eran conmovedoras: muchos llevaban flores y las comidas favoritas de sus familiares fallecidos. Otros, en un gesto de profunda tradición cultural, estuvieron acompañados de grupos de artistas y aficionados para el «cantasicuy», ritual musical en honor a los que ya no están entre nosotros. La presencia de personas provenientes de diversas ciudades marcó la jornada, dando testimonio de la profundidad de esta tradición en el corazón de los peruanos.

Dato:

Paralelamente, en horas previas a esta significativa fecha, sacerdotes ofrecieron misas masivas tanto en Ripán como en La Unión, uniendo en oración a la comunidad y reafirmando el profundo sentimiento de fe y esperanza que caracteriza a estos días de conmemoración.