A raíz del trágico accidente en la Carretera Central, entre Pasco y Huánuco, con un saldo de 28 muertos y 22 heridos, la Sutrán lanzó un comunicado lavándose las manos e indicando que el bus tenía todo en regla y cual abogado defensor, señaló que el bus maldito estaba en perfectas condiciones.
Justificó que el mal tiempo, la neblina y la lluvia fueron los causantes de desgraciar a más de 50 familias.
Acaso no había mayor cantidad de pasajeros de lo normal, la Sutrán controla la velocidad a los conductores y a los buses “piratas” que recogen pasajeros en ruta o en el óvalo de Cayhuayna, acaso no es su trabajo y responsabilidad ver si tienen sus documentos al día o es que solo controlan a las empresas formales.
Da la impresión que la Sutrán, casi estuviera defendiendo a la empresa Estrella Polar, porque dijo que está muy organizada, que tiene un moderno terminal y que sus conductores son los mejores del medio. ¿Acaso no fue por falla humana, cansancio, sueño, exceso de velocidad, que por esas curvas, por algo denominadas “del Diablo”, bajaba a más de 100 km/h?
No podemos explicarnos, ¿cómo este accidente ocasionó tantas pérdidas humanas a pesar que solo se desbarrancó cinco metros?