Decenas de familiares, amigos, vecinos y representantes de instituciones feministas. Protestaron ayer en las inmediaciones de la Fiscalía y del Poder Judicial, exigiendo celeridad en la sentencia de Trinit Bautista Rosas (27), feminicida confeso de Damaris Zenaida Rojas Suárez (27).
“Hoy fue Damaris, mañana podría ser tu hermana o tu hija. El trabajo de jueces y fiscales no debe ser a paso lento, sino rápido, por eso hemos venido a reclamar”, manifestó la madre de Damaris.
Los familiares denunciaron que en el mes de diciembre se cumple la prisión preventiva otorgada contra el feminicida confeso Trinit Bautista. Luego podría quedar en libertad, debido a que, hasta la fecha, aún no ha sido acusado formalmente por el Ministerio Público.
Los manifestantes, con pancartas en mano y a viva voz, exigían la celeridad de las investigaciones y una sentencia de cadena perpetua, por el macabro crimen de la enfermera técnica.
“A mi hija la hizo padecer, le sacaron el ojo, la quemaron, pido justicia, pido cadena perpetua para ese sujeto. Si ese desgraciado (Trinit) sale de prisión, se va a llevar a mi nieto y lo puede matar”, manifestó la madre de Damaris, entre lágrimas.
Hechos
El primero de septiembre del 2019, la enfermera técnica Damaris Zenaida Rojas Suárez (27), fue interceptada por su expareja Trinit Bautista a bordo de su trimóvil. Quien la convenció de llevarla a su casa, luego en el trayecto, le compró chaufa y gaseosa, y en la bebida le habría suministrado un somnífero.
La joven quedó inconsciente tras beber la gaseosa y fue llevaba hasta una vivienda ubicada en la carretera Huánuco Aeropuerto, en el poblado de Colpa Baja. El sujeto, aprovechando que Damaris estaba inconsciente, desbloqueó su celular con su huella dactilar, y habría encontrado mensaje de texto de otro hombre.
Cuando la joven recobró la conciencia, discutieron y el sujeto terminó atacándola a fierrazos en la cabeza y acabó con la vida de la madre de su hijo. Luego la metió en un pozo de diez metros de profundidad. Ubicado en el patio de la vivienda, y lo tapó con un colchón, llantas, piedras y tierra.
Luego de una intensa búsqueda, el 13 de septiembre, Trinit Bautista Rosas fue encontrado por los familiares de la víctima a la altura del Puente Moras recargando combustible a su vehículo, donde lo arrestaron.
El sujeto fue golpeado por la turba. Exigiendo que dijera sobre el paradero de Damaris, pero el astuto Trinit Bautista para no ser linchado. Armó una coartada y manifestó que ella estaba viva y estaba raptada en Tomayquichua. Hasta donde lo llevaron los familiares con las esperanzas de encontrar con vida a la joven, sin embargo, todo era mentira.
Hasta el lugar llegaron policías a quienes el sujeto les confesó que la joven estaba enterrada en un pozo en Colpa Baja. Los efectivos policiales llegaron al sitio y tras un arduo trabajo, encontraron el cuerpo en avanzado estado de descomposición.
El sujeto fue enviado a prisión, donde espera su sentencia, pero pese a que ya pasaron dos años y próximos a cumplirse la prisión preventiva otorgada. Aún no se ha formalizado la acusación, por lo que los familiares temen que el sujeto salga en libertad. Como lo hizo la primera vez, que fue encarcelado por dopar y raptar a Damaris, a su hijo y tras salir de prisión acabó la vida de la joven madre. Cuyo hijo de cuatro años quedó en orfandad.
DATO. El 12 de noviembre del 2021 se realizaría el control de acusación contra el feminicida confeso, Trinit Bautista Rosas. Según informaron los familiares tras reunirse con las autoridades judiciales.
