Informalidad reina en los transportistas de Pasco

Los transportistas en Cerro de Pasco están actuando con total impunidad debido a la falta de control y la complacencia del alcalde Julio Rupay. A pesar de sus intentos iniciales por regular el transporte urbano en la ciudad, el alcalde retrocedió cobardemente, lo que permite que los transportistas hagan lo que quieran.

Son varias de las denuncias ciudadanas de combis que rechazan o deciden “ignorar” a los niños que intentan abordar sus vehículos en horarios de gran demanda, como a la salida de la escuela.

Es increíble el descaro y la falta de respeto de estos transportistas, que ahora actúan con total libertad en Cerro de Pasco debido a la falta de control. A pesar de que los usuarios habían acatado la disposición municipal de pagar 80 céntimos por el pasaje urbano, los transportistas impusieron un aumento a 90 céntimos sin consecuencias. El alcalde, en lugar de tomar medidas efectivas, simplemente declaró «ruta libre», lo cual no se ha cumplido.

Ahora el pasaje urbano es de 90 céntimos porque así lo decidieron los transportistas, y si deciden subir el precio nuevamente, lo harán sin que nadie los detenga. No hay control, fiscalización ni autoridad municipal que imponga el orden. Los transportistas actúan de manera autónoma, decidiendo cuándo recoger pasajeros y cuándo prestar sus servicios.

Es lamentable que el exalcalde Marco de la Cruz, quien ya era conocido por su poca capacidad de gestión, ahora tenga un sucesor a su nivel. Los ciudadanos merecen un alcalde capaz y comprometido que ponga fin a los abusos de los transportistas y garantice un servicio de transporte adecuado en la ciudad.