El periodista reconocido César Hildebrandt cuestionó duramente la reciente designación de Julio Díaz Zulueta como nuevo titular del Ministerio del Interior, señalando que esta responde a una clara influencia del líder de Alianza para el Progreso (APP), César Acuña. Según afirmó, Díaz es un militante activo del partido y su nombramiento habría sido una sugerencia directa del excandidato presidencial.
«El nuevo ministro es militante de APP y ha sido colocado por recomendación de César Acuña, un personaje que, pese a representar el analfabetismo funcional, ha fundado exitosas universidades. Él ha puesto al señor Díaz Zulueta en el Ministerio del Interior», señaló Hildebrandt con tono crítico.
Además, el periodista destacó que Díaz Zulueta fue viceministro durante la gestión de Juan José Santiváñez, su antecesor recientemente censurado por el Congreso. Este vínculo, indicado, garantiza que no habrá cambios sustanciales en la conducción del sector. “No existe una estrategia clara para enfrentar el crimen organizado, ni una visión seria del problema”, lamentó.
Hildebrandt también responsabilizó a la presidenta Dina Boluarte por la falta de políticas públicas efectivas frente a la creciente inseguridad. «La mandataria no tiene visión. Está enfocada únicamente en su supervivencia política. No hay planes integrales ni voluntad de enfrentar el problema con seriedad», declaró.
En su análisis, advirtió que el país necesita una reforma profunda de la Policía Nacional, con depuración interna, mejoras salariales y una estrategia de inteligencia que articule a todos los servicios. “No se puede combatir el crimen con comisarías que no atienden ni con motocicletas descompuestas”, sentenció.
La juramentación de Julio Díaz Zulueta, realizada el 24 de marzo en Palacio de Gobierno, se dio en un contexto crítico, marcada por altos índices de delincuencia, extorsiones y 509 asesinatos registrados en lo que va del año, según datos del Sinadef. La salida de Santiváñez, a pesar de sus intentos por aferrarse al cargo, fue inevitable tras su censura parlamentaria y el escaso respaldo político.