Francisco Sagasti critica al gobierno de Boluarte: No merece el respeto ciudadano

Desde su salida del Palacio de Gobierno, el expresidente Francisco Sagasti ha mantenido una postura crítica hacia la clase política peruana, aunque con moderación en sus declaraciones. Sin embargo, la reciente destitución de Manuel Burga como director del Lugar de la Memoria, la Tolerancia y la Inclusión Social (LUM) lo llevó a afirmar que el gobierno de Dina Boluarte “no merece el respeto de la ciudadanía”.

Sagasti destacó la trayectoria académica e intelectual de Burga, calificándolo como un profesional distinguido. A su juicio, su destitución tras siete años al frente del LUM constituye un «abuso arbitrario». El exmandatario señaló que esta decisión proviene de un gobierno que enfrenta “un rotundo rechazo popular”, con una aprobación que apenas alcanza el 3%.

En una reciente entrevista con Infobae Perú, Sagasti subrayó: “Un mínimo apoyo de la ciudadanía es necesario para gobernar legítimamente. Además, la presentación de resultados en plazos razonables es un requisito fundamental para la legitimidad de cualquier gobernante”. Estas declaraciones se dan en un contexto donde el Poder Ejecutivo ha sido incapaz de controlar la creciente ola de violencia y criminalidad que marcó el último año.

La destitución de Manuel Burga

El pasado martes 7 de enero, Manuel Burga, hasta entonces director del LUM, fue informado de manera sorpresiva de su destitución. Este anuncio fue confirmado por el viceministro de Patrimonio Cultural, Jamer Chávez Anticona, quien asumió inmediatamente la dirección de la institución.

La gestión de Burga había sido blanco de críticas por parte de grupos de extrema derecha, como La Resistencia, quienes acusaban al LUM de «distorsionar» los hechos ocurridos durante los años de violencia política en Perú.

Manuel Burga Díaz es un destacado historiador, doctorado en Historia por la Universidad de París I – La Sorbona, y cuenta con un posdoctorado en antropología histórica en la École des Hautes Études en Sciences Sociales de París. A lo largo de su carrera, ha defendido la memoria histórica y los derechos humanos, abordando temas como la historia de la educación superior en Perú y la memoria oral de diversas comunidades del país.

Para Sagasti, la destitución de Burga es una muestra más de la falta de legitimidad del actual gobierno. Según él, esta medida no solo afecta la institucionalidad del LUM, sino que también evidencia el desprecio de las autoridades hacia la memoria histórica y los derechos humanos.

Sagasti y las elecciones del 2026

Durante la entrevista con Infobae Perú, Francisco Sagasti también aclaró que no tiene intención de postular a la presidencia en las elecciones generales del 2026. Sin embargo, dejó abierta la posibilidad de postular al Senado, aunque con reservas. “Mire, me han sugerido eso también, pero le hago una pregunta: ¿querría usted pasarse cinco años, cuando tenga 82, con el tipo de personajes que estarán en el Congreso en ese momento?”, comentó.

A poco más de un año de las elecciones, el panorama político peruano sigue siendo incierto. Aunque aún no se han confirmado candidaturas, diversas agrupaciones políticas ya se preparan para los comicios. En abril de 2026, los ciudadanos elegirán al nuevo presidente, vicepresidentes, diputados, senadores y representantes al Parlamento Andino.

La reintroducción del sistema bicameral marca un cambio importante en el sistema político peruano, que ha sido unicameral desde el autogolpe de Estado de Alberto Fujimori en 1992. Este retorno a las dos cámaras supone un desafío tanto logístico como político para las instituciones y los partidos del país.

El panorama político actual

El Registro de Organizaciones Políticas del Jurado Nacional de Elecciones (ROP) ha habilitado a 39 partidos políticos para participar en los próximos comicios. Entre ellos se encuentran Acción Popular, Renovación Popular, Partido Morado, Somos Perú, Salvemos al Perú, Partido Aprista Peruano, Partido Popular Cristiano, Ahora Nación, Fe en el Perú, Alianza para el Progreso, Avanza País, Libertad Popular, Nuevo Perú, Juntos por el Perú, Perú Libre, Podemos Perú, Primero La Gente y Perú Primero.

Sin embargo, la baja confianza ciudadana en la clase política plantea un desafío adicional. La aprobación de Dina Boluarte, que se encuentra en niveles históricamente bajos, refleja un descontento generalizado hacia las instituciones del Estado. Para Sagasti, este clima de rechazo popular hace imprescindible una renovación profunda de la política peruana.

La memoria histórica en juego

La destitución de Manuel Burga ha generado un debate sobre el rol del Lugar de la Memoria y la importancia de preservar un enfoque imparcial en torno a los hechos de violencia política que marcaron al país durante décadas. Grupos como La Resistencia han cuestionado la versión de la historia promovida por el LUM, acusándolo de favorecer una narrativa sesgada.

Por otro lado, defensores de Burga y organizaciones de derechos humanos advierten que estas críticas son intentos por deslegitimar la búsqueda de justicia y memoria. Para Sagasti, la labor del LUM es crucial para evitar que los errores del pasado se repitan. En sus palabras: “La memoria histórica no es un lujo, es una necesidad para construir una sociedad justa y reconciliada”.

A medida que se acercan las elecciones del 2026, el debate sobre la memoria histórica, la legitimidad del gobierno y el futuro del país seguirán siendo temas centrales en el discurso público. Para figuras como Sagasti, la clave estará en recuperar la confianza ciudadana y garantizar que las instituciones respondan a las necesidades de todos los peruanos.