La Corte Suprema emitió recientemente una sentencia que clarifica un tema crucial para miles de trabajadores contratados bajo la modalidad de suplencia: cuándo corresponde pasar de un contrato temporal a uno de duración indeterminada. Según la resolución, si un trabajador contratado para reemplazar a otro comienza a asumir funciones diferentes a las pactadas originalmente, se rompe la naturaleza del contrato temporal y se desnaturaliza, transformándose en uno indefinido.
El caso surgió tras la demanda de un trabajador que, pese a haber sido contratado como suplente, terminó realizando labores ajenas a la suplencia, prolongando su vínculo por un periodo prolongado sin justificación. La Corte determinó que esta práctica vulnera el principio de causalidad que rige los contratos sujetos a modalidad y refuerza la estabilidad laboral como derecho fundamental.
Impacto para empresas y trabajadores
La decisión del máximo tribunal establece un precedente que obliga a las empresas a revisar cuidadosamente las funciones reales que desempeñan sus trabajadores contratados por suplencia. La desnaturalización del contrato puede implicar sanciones, pago de beneficios laborales y la obligación de reincorporar al trabajador en calidad de indeterminado.
Abogados laboralistas destacan que esta sentencia refuerza la protección frente a despidos arbitrarios y promueve la formalidad en el mercado laboral. Asimismo, recuerdan que el abuso de contratos temporales ha sido una práctica recurrente en diversos sectores, afectando principalmente a empleados jóvenes y a quienes desempeñan funciones operativas.
La resolución de la Corte Suprema subraya que la estabilidad en el empleo es un componente esencial para garantizar la dignidad y la seguridad económica de los ciudadanos.