Brindando un pobre partido, considerado el peor que jugó Perú en la era Gareca, cayó por 2-0 ante El Salvador, en amistoso que disputó anoche en la ciudad de Washington, capital de los Estados Unidos.
Los jugadores peruanos se creyeron que enfrentaban a un rival de inferior categoría y desplegaron un juego displicente, menospreciando a los rivales, pensando que los goles iban a caer por su propio peso, pero no pensaron que por esas cosas que siempre ocurren en el fútbol, la situación se les iba a voltear.
Es cierto que Perú fue superior en la primera etapa, en la que tuvo varias ocasiones claras para anotar, pero no concretó; es cierto que El Salvador se limitó a replegarse y esperar los ataques peruanos para buscar el contragolpe, y en la etapa inicial nunca se acercó al arco de Gallese, pero en el segundo tiempo cuando Perú fue todavía más displicente, El Salvador se animó a salir un poco más y tuvo la suerte de que Trauco cometa ese autogol que determinó su triunfo. Y la cereza en el pastel la puso Oscar Ceren de un contragolpe fulminante cuando ya se jugaban los descuentos (92’), para el 2-0 final que dejó muy mal parado al seleccionado peruano en esta fecha FIFA.
El triunfo salvadoreño es más meritorio porque jugó con mayoría de suplentes, mientras que Perú puso a sus mejores elementos.