El plan de Trump para convertir a Larry Ellison en el próximo magnate de los medios

El magnate tecnológico Larry Ellison, conocido durante décadas por su ostentosa vida y su rol como el ejecutivo de Silicon Valley que mejor sabía disfrutar, parece estar redefiniendo sus prioridades. Gastó cifras astronómicas, hasta 200 millones de dólares, en construir una villa de inspiración japonesa cerca de Palo Alto, California, adquirió la sexta isla más grande de Hawái, y sus matrimonios y divorcios siempre fueron noticia.

Según la investigación publicada por The New York Times, la atención sobre Oracle, su compañía de bases de datos, era a menudo eclipsada por sus extravagancias personales. Incluso, en 2013, su ausencia en la presentación principal de la convención anual de Oracle en San Francisco, debido a su participación en la America’s Cup a bordo de su yate, se convirtió en un símbolo de su despreocupación. Su biografía llegó a titularse «La Diferencia Entre Dios y Larry Ellison: Dios No Cree Ser Larry Ellison».

Con una fortuna que asciende a 175 mil millones de dólares, las posibilidades de que Ellison pueda realizar una compra que realmente impacte su bolsillo son escasas. En 2022, rompió un récord en Florida al adquirir una propiedad de 22 acres cerca de Palm Beach, pero el precio de 173 millones de dólares representó apenas una fracción de su inmensa riqueza. Ese mismo año, invirtió mil millones de dólares en la adquisición de Twitter por parte de Elon Musk, argumentando que «sería muy divertido».

Ahora, a los 80 años y con cinco o posiblemente seis matrimonios a sus espaldas, Ellison busca expandir sus ambiciones más allá del mero disfrute y la acumulación de bienes. Siguiendo el camino trazado por su amigo Musk, quien posee al menos seis compañías interconectadas, Ellison parece estar planeando una expansión de su imperio corporativo, marcando una nueva etapa en su trayectoria empresarial.

Oracle ha surgido como un posible postor para TikTok, la popular aplicación de vídeos que el Congreso estadounidense ha determinado que debe separarse de su empresa matriz china, ByteDance, o enfrentar una prohibición en Estados Unidos. La administración Trump se encuentra evaluando opciones sobre la estructura de propiedad de la aplicación. Existe una fecha límite para llegar a un acuerdo, aunque ya se han incumplido plazos anteriores en el caso de TikTok, lo que añade incertidumbre al panorama.

En 2020, Oracle estuvo a punto de convertirse en accionista minoritario de las operaciones de TikTok en Estados Unidos, junto con Walmart, en un momento de gran preocupación por la seguridad de los datos de los usuarios. Se negoció un acuerdo en el que Oracle comenzaría a almacenar los datos de los usuarios estadounidenses en su nube. Oracle también poseería el 12,5 por ciento de una nueva compañía, TikTok Global. Esta última parte, como muchos otros acuerdos relacionados con TikTok, nunca se materializó. Se especula ahora sobre si Ellison, influenciado por la visión de ecosistema empresarial de Musk, busca consolidar una red de empresas donde Oracle juegue un papel central en el manejo y la seguridad de datos a gran escala.