Estados Unidos ha intensificado su ofensiva militar contra los hutíes en Yemen, como respuesta a los ataques del grupo rebelde contra el transporte marítimo en el Mar Rojo. Según confirmó el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Mike Waltz, los recientes bombardeos han alcanzado objetivos estratégicos, incluidos líderes del grupo, entre ellos su principal experto en misiles.
“Hemos atacado su cuartel general, nodos de comunicaciones, fábricas de armas e incluso algunas de sus instalaciones de producción de drones”, detalló Waltz en una entrevista con CBS News. Aunque no reveló nombres, aseguró que algunos de los máximos responsables de las operaciones hutíes han sido eliminados.
Desde noviembre de 2023, los hutíes han atacado más de 100 embarcaciones comerciales con drones y misiles, provocando el hundimiento de dos barcos y la muerte de al menos cuatro marineros. Alegan que sus acciones son en apoyo a la causa palestina ante la ofensiva israelí en Gaza. Estos ataques han incrementado su notoriedad en el mundo árabe, eclipsando las denuncias por violaciones a los derechos humanos en Yemen.
El presidente de Estados Unidos reiteró que comenzará con la campaña militar: “Usaremos una fuerza letal abrumadora hasta que logremos nuestro objetivo”. Paralelamente, el secretario de Estado, Marco Rubio, aseguró que varias instalaciones militares hutíes han sido destruidas y que los operativos continuarán hasta desmantelar su capacidad ofensiva.
Desde enero de 2024, Estados Unidos y el Reino Unido han lanzado más de 260 ataques aéreos contra posiciones hutíes, según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos. Aunque la administración Biden ha mantenido un enfoque cauteloso para evitar víctimas civiles, la administración Trump ha manifestado públicamente su intención de ampliar los objetivos.
Israel también ha llevado a cabo bombardeos contra los hutíes, específicamente en la ciudad portuaria de Hodeida, en respuesta a los ataques del grupo con drones y misiles contra su territorio.
