Eduardo Salhuana, presidente del Congreso, se encuentra bajo escrutinio por su posible involucramiento en favorecer la minería ilegal a través de diversos proyectos de ley, así como por sus múltiples encuentros con mineros informales en Madre de Dios y Arequipa. Estas acciones están siendo investigadas por la Fiscalía, que ha registrado 65 reuniones entre el legislador y grupos mineros informales, generando preocupaciones sobre posibles conexiones con actividades ilícitas.
En una reciente entrevista con Canal N, Salhuana intentó diferenciar entre minería ilegal y minería informal, asegurando que su interacción con los mineros no respalda actividades ilegales. «Como único congresista de Madre de Dios, me veo en la necesidad de reunirme con los dirigentes de la minería informal, dado que gran parte del PBI regional proviene de esta industria», explicó.
Salhuana también abordó los desafíos en la formalización de la minería en la región, señalando que desde 2012 solo 2000 mineros han completado este proceso, lo que ha contribuido a la contaminación y deforestación.
El parlamentario defendió sus iniciativas legislativas, alegando que todas se centran en zonas legalmente designadas para la minería y buscan evitar la proliferación de la minería ilegal. Su gestión en el Congreso y sus proyectos continúan generando debate, especialmente tras la aprobación de un decreto que limita las facultades ejecutivas sobre la pequeña minería y la minería artesanal.