Es cierto que cada región debe tener totalmente demarcado su territorio, para trabajar por su desarrollo, brindar servicios, construir caminos, escuelas, hospitales, de tal manera que se lleve una convivencia armoniosa, entre pobladores y autoridades.
La caprichosa geografía del Perú, hace muy difícil precisar los límites territoriales, estos se han hecho tomando como referencia los accidentes geográficos de una manera no tan precisa. De esta manera, constituyen linderos los cerros, quebradas, ríos o rocas, que a través de los años deberían mantenerse intangibles; pero no faltan “vivos” o políticos que lejos de dedicarse a trabajar por su región alientan la invasión de territorios ajenos con fines politiqueros, creando conflictos que pueden llevar a enfrentamientos entre peruanos por las ambiciones expansionistas de estos.
Es el caso del actual gobernador de Pasco, que pretende anexar a su región territorios de las provincias de Lauricocha y Pachitea, como ya sucedió con la provincia de Oxapampa anteriormente. Los pueblos en una consulta, de seguro señalarán que las zonas del Pozuzo, desde la creación de la provincia del gran Pachitea, con sus pueblos de Santa Virginia, Cañachacra, Acobamba, son tierras pachiteanas, cuya integridad defendió el reconocido geógrafo Rómer Santa María Hidalgo.
Acaso no es una pérdida de tiempo, de dinero, que las gobernaciones se enfrazquen en discusiones y reuniones para trazar nuevos mapas, con el objetivo tal vez de ganar mayor cantidad de votantes, o porque quizás saben que en los lugares que pretenden adueñarse hay yacimientos mineros, hay petróleo y bosques madereros aún no explotados.
Más bien en esas reuniones deberían trabajar juntos por el desarrollo de sus pueblos, construir mejores carreteras, que los campesinos y ganaderos, puedan explotar su productos, que los escolares tengan una buena educación, Desgraciadamente esos pueblos están olvidados en el tiempo, lejos de decidir en un escritorio por qué no se constituyen al lugar, dialoguen con los habitantes y al final ellos mismos definan su futuro.