¿DESHUMANIZACIÓN EN PLENO SIGLO XXI?

Por: Diofer Vásquez Aguirre

En pleno siglo XXI, muchos líderes están por los suelos, y dan vergüenza con su cargo actual. El tema amerita a una reflexión para mejorar en cuanto sea posible y no afanarme a escribir dos tres veces llamándoles la atención.
Muchos líderes se encuentran en las empresas y otras entidades, y son quienes contratan personas para asumir responsabilidades dentro de su gestión empresarial, donde su misión es vender más y tener mayor ingresos adicionales, ocasionando inconformidad a los personales que asumen el trabajo, como por ejemplo ampliando las horas laborales, pagando menos de 750 soles mensual, sin registrarles al seguro de salud, sin darles gratificación a los que trabajan por un año o más, hechos que se muestran sobre todo en micro empresas donde la contratación del personal es de manera informal (en muchos casos sólo se da un acuerdo verbal entre el trabajador y el empresario), para aprovechar su mano de obra barata. Muchas veces reciben maltrato psicológico e incluso físico. Autoridades, que sólo de nombre lo tienen, no dan importancia.
Los jóvenes de hoy, buscan un futuro diferente, pero con este sistema burgués de vividores, donde su frase común es: “El vivo vive del sonso y el sonso de su trabajo”, ¿Qué esperanza queda?
En este siglo se necesita docentes comprometidos con la sociedad, cultura, política y ética profesional de trabajo académico. Debe sentirse satisfecho sólo cuando su estudiante aprendió algo en el periodo de su enseñanza, aunque este ganando una miseria y no debe buscar pretexto de conjunción desaprobando a los estudiantes y vivir renegado de su profesión.
Me dirijo a nuestra prestigiosa Universidad Hermilio Valdizán alma mater que ofrece las diversas carreras profesionales proponiendo a los jóvenes que ganarán el respeto y la felicidad al ingresar a la mencionada institución. Muchos lloran de ilusión por haber ingresado estudiando noche y día para mañana ser mejor que sus padres, realmente es la ilusión de muchas familias, ante ello reflexiono y me pregunto: ¿Sentirán el mismo orgullo qué sentían al ingresar cuando egresan de la carrera que escogieron, o sólo será un compromiso de familia, amigos y la sociedad para llevar acabo su graduación?… menciono ello porque muchos docentes de dicha casa superior de estudios no asumen el rol que les corresponde, más por el contrario se muestran autoritarios, memorísticos, irresponsables e incluso algunos llegan a maltratar psicológica y físicamente a los estudiantes, y eso sin mencionar la búsqueda de una coima o el acoso sexual.
Acaso no es vergonzoso y decepcionante eso; aunque no todos caminan por el riel oscuro, porque existe también maestros de alta calidad ética y respeto. Estas son algunas de las razones de mi crítica, aunque quizá se alejen algunos amigos míos, pero qué me queda, la verdad es la verdad y eso no ha de negarlo nadie o sí? … aunque con este sistema se obtiene todo ello y se tendrá casi siempre hasta que no se lo derrumbe por completo, y para eso estamos muy lejos, por falta de lectura, compromiso, solidaridad con nosotros mismos.