La joven Flor Vanessa Acuña Jáuregui (29), identificada con documento nacional de identidad n. ° 47152306, manifestó que fue “maltratada y discriminada” por algunos trabajadores del Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel) en Huánuco, por indicar que su madre estuvo infectada de la COVID-19.
Acuña contó que la tarde del jueves, acudió al Osiptel con todas las medidas de bioseguridad para presentar una queja contra la operadora de telefonía celular Movistar por el abonado de su madre, ya que no podía realizarlo de manera virtual. Al llegar a la sede institucional, fue interrogada por el personal de seguridad, a quienes les manifestó que su madre tuvo la COVID-19.
Ante ello, la vigilante del local le impidió el ingreso y llamó a uno de los trabajadores. Este sacó una silla cerca de la puerta del Osiptel y recibió la queja de Flor con cierto recelo. “Me atendió casi en la calle. Me sentí discriminada porque le dije que mi madre tuvo COVID-19. Y me miraban como si me tuvieran asco. Se negaron a darme el libro de reclamaciones”, detalló la joven.