En medio de una crisis hospitalaria que ya ha captado la atención de los medios nacionales, el Director del Hospital de Contingencia de Tingo María, Rafú Hidalgo Tuesta, se encuentra bajo el escrutinio público. Una trabajadora del hospital capturó el momento en que el director ingresó al recinto a bordo de su camioneta roja, mientras que el resto del personal médico y trabajadores deben caminar más de 200 metros para acceder al centro médico.
Esta denuncia surge en el contexto de una reciente exposición periodística por parte de Canal N, que puso en evidencia las problemáticas del hospital, incluyendo la demanda de traslado del hospital de contingencia al nuevo edificio hospitalario. Según los trabajadores, la actitud del director es una respuesta directa a esta cobertura mediática.
Un empleado del hospital, que prefirió mantenerse en el anonimato, declaró: «Denuncio los ‘privilegios’ que tiene el director, mientras los que no contamos con movilidad, tenemos que caminar este largo trecho bajo el incesante sol». Otro trabajador añadió: «Hoy salí de guardia y con lluvia sobre mis espaldas llegué a la puerta cerca a la pista. Este accionar de los ejecutivos de turno es un atentado contra la salud e integridad de los trabajadores y dista mucho de lo que es seguridad en el trabajo».
La situación ha generado malestar entre el personal del hospital, que ya enfrenta condiciones laborales difíciles en medio de la pandemia. La denuncia pone en tela de juicio no solo las condiciones de acceso al hospital, sino también la gestión y ética profesional del director Rafú Hidalgo Tuesta.
La denuncia contra el director del Hospital de Contingencia de Tingo María se suma a una serie de cuestionamientos sobre la gestión hospitalaria en la región, en un momento en que el sistema de salud enfrenta múltiples desafíos.
