La ausencia de lluvias ha afectado gravemente al sector agrícola y ganadero
La provincia de Tahuamanu en Madre de Dios registró una temperatura atípica de 40.2°C el pasado 27 de septiembre, según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi). «No se tienen registros similares en esta región», señaló Irving Lizarraga Isla, responsable de la oficina de enlace del Senamhi en Madre de Dios.
Las altas temperaturas, sumadas a la falta de lluvias, han generado una situación crítica en la región. Carlos Augusto Quispecuro Nina, responsable de la Autoridad Administrativa del Agua en Madre de Dios, indicó que el río Madre de Dios registra un caudal de 1155 m³/s, calificándolo como «un caudal crítico y mínimo».
La ausencia de lluvias ha afectado gravemente al sector agrícola y ganadero. «Se han perdido pastos por efecto de la sequía y los incendios forestales. Los ganados están enflaqueciendo», afirmó Carlos Ortega Molleda, director regional de agricultura. Además, la falta de agua podría elevar los costos de productos agrícolas como papaya, piña y plátanos, de los cuales Madre de Dios ha sido un proveedor clave para la capital y la macro región sur.
El turismo, otro pilar económico de la región, también se ve amenazado. La disminución del caudal de los ríos ha hecho más riesgoso el traslado de turistas a la Reserva Nacional Tambopata. «Madre de Dios está sufriendo lo que se denomina un estrés hídrico», añadió Quispecuro Nina, quien demanda que la región sea incluida en los decretos de emergencia del Estado por la falta de agua.
Sin embargo, algunos emprendedores han encontrado una oportunidad en la crisis. La baja del caudal ha hecho que aparezcan más de 15 playas con grandes extensiones, donde se organizan eventos de recreación y gastronomía. «Más de cinco mil personas acuden a bañarse, nadar, descansar y pasarla en familia», señala un informe local.
Dato
La situación en Madre de Dios es un llamado de atención sobre la necesidad de políticas de adaptación y mitigación ante los efectos del cambio climático y la variabilidad climática. Mientras tanto, las autoridades y la población exigen al gobierno central que considere a la región dentro de los alcances del decreto de emergencia ante la crisis hídrica que enfrenta el país.