El gobernador de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, enfrentó una violenta protesta en Huanta este jueves, donde fue repudiado por miles de manifestantes durante un paro que reclama el cese de operaciones mineras en la región. Oscorima, quien llegó a la ciudad para dialogar sobre las tensiones en torno a las concesiones mineras en la cuenca del Razuhuillca, tuvo que ser evacuado en helicóptero ante el escalamiento de la hostilidad.
La visita del gobernador se produjo en medio de una paralización general que ha generado cierres de mercados y bloqueos de carreteras. Más de 15,000 personas se congregaron en el estadio local donde Oscorima intentó presentar soluciones a la huelga indefinida que exige la anulación de las concesiones mineras y la protección de la principal fuente de agua del valle de Huanta y parte del distrito de La Mar.
La situación se agravó cuando los manifestantes, armados con piedras y palos, comenzaron a agredir al gobernador, forzando la intervención de la Policía Nacional que usó bombas lacrimógenas para dispersar a la multitud. Los esfuerzos de la policía por calmar la situación fracasaron, culminando en la rápida evacuación aérea de Oscorima.
El Frente de Defensa y Desarrollo de la Provincia de Huanta, junto con diversas organizaciones civiles y comités antimineros, lideran las protestas, acusando al gobierno regional y nacional de ignorar sus demandas ambientales y sociales. La situación en Ayacucho sigue siendo tensa, con llamados a diálogo efectivo y medidas concretas para resolver esta crisis prolongada