En el Centro Poblado de Marabamba, la inseguridad creciente ha impulsado a los vecinos a organizarse para hacer frente a la delincuencia. Ante el aumento de robos y actos delictivos, la población ha decidido tomar medidas drásticas, formando juntas vecinales y patrullas nocturnas para vigilar las calles de la Ciudad Satélite.
Mensajes como «choro atrapado, choro quemado» se han vuelto comunes en las pintas de las paredes, mostrando la determinación de la comunidad para enfrentar a los delincuentes. Los vecinos han tomado el control de la situación, equipándose con chalecos y silbatos, y patrullando los diferentes sectores de la zona.
Eladio Rosales Salazar, uno de los líderes comunitarios, ha hecho un llamado a la acción, instando a sus vecinos a organizarse y comenzar con la vigilancia sectorial. «¿Qué estamos esperando?» preguntó Rosales, destacando la urgencia de la situación.
Además, la comunidad ha solicitado el apoyo de la alcaldesa Candy Rucoba Moreno, pidiendo que reactive las juntas vecinales y las rondas urbanas, instando a las autoridades locales a liderar los esfuerzos de seguridad. Se espera que la alcaldesa y sus regidores tomen medidas inmediatas para hacer frente a la inseguridad que afecta a los 7 mil habitantes de Marabamba.
La cercanía con otras zonas, como Casuarinas, también ha generado preocupación. Los residentes de esta área están en constante alerta, vigilando cualquier actividad sospechosa durante las noches. El crecimiento acelerado de la población en los últimos meses ha sido acompañado por la aparición de individuos desconocidos que han sido vistos merodeando por los barrios, lo que ha elevado las alarmas entre los vecinos.
La comunidad de Marabamba ha dejado claro que no tolerará la delincuencia, y están dispuestos a actuar con firmeza para defender la tranquilidad y seguridad de su población.