Por Jimmy Trujillo Olivo

Las empresas en crecimiento se enfrentan a una serie de retos. A medida que una empresa crece, los distintos problemas y oportunidades exigen soluciones diferentes: lo que funcionaba hace un año puede no ser ahora el mejor enfoque. Con demasiada frecuencia, los errores evitables convierten lo que podría haber sido un gran negocio en un fracaso.
Reconocer y superar los peligros habituales asociados al crecimiento es esencial para que su empresa siga creciendo y prosperando. Lo más importante es que te asegures de que las medidas que tomes hoy no creen problemas adicionales para el futuro. Un liderazgo eficaz le ayudará a aprovechar al máximo las oportunidades, creando un crecimiento sostenible para el futuro.
Los retos del crecimiento pueden agruparse en cinco áreas:
1. 1. Equipo de trabajo:
A medida que la empresa crece y se desarrolla, el equipo de personas que necesita para apoyar ese crecimiento cambia. Las aptitudes, la experiencia y la motivación necesarias para el éxito del crecimiento no son las mismas que las que se necesitan para mantener un negocio a un ritmo más estable. Se necesita un equipo que entienda cómo crear y aplicar una estrategia de crecimiento. Su equipo debe ser capaz de identificar las nuevas oportunidades de mercado, desarrollar y ofrecer nuevos productos, servicios, procesos y tecnologías.
Los retos y habilidades necesarios para hacer crecer con éxito una empresa que ya tiene éxito suelen ser muy diferentes de los que se necesitan para dar la vuelta a una empresa que fracasa. En una empresa en crecimiento, el objetivo principal es identificar, desarrollar y explotar las oportunidades de mercado. La energía positiva y el impulso son los ingredientes esenciales. En una empresa en transformación, ocurre lo contrario. En un cambio de rumbo, el objetivo principal debe ser la reducción de costes y la recuperación de la moral del equipo.
2. Los números:
Los números no siempre mienten, pero a menudo tampoco cuentan toda la historia. Un estado financiero puede decir si la empresa está ganando o perdiendo dinero, pero a menudo no proporciona la historia de lo que exactamente está impulsando los resultados.
Años de trabajo con empresas de una amplia gama de sectores me han enseñado una cosa: los números siempre importan, pero cuando se busca el crecimiento, la historia subyacente suele ser igual de importante. Los números ayudan a entender la historia, pero no la cuentan por completo. Para ayudarles a alcanzar sus objetivos empresariales, es esencial que los líderes empresariales entiendan no sólo lo que significan los números, sino también cómo utilizarlos para informar sus decisiones empresariales.
3. Los productos, servicios y procesos:
La clave del éxito del crecimiento es encontrar y aprovechar las oportunidades para crear y ofrecer nuevos productos y servicios. El reto consiste en desarrollar y ofrecer un nuevo producto o servicio que satisfaga una necesidad del cliente y genere suficientes ingresos para cubrir los costes.
En las primeras etapas de crecimiento, a menudo tiene sentido asociarse con otra empresa que ya tiene un producto o servicio desarrollado. Al asociarte, puedes evitar los costes de desarrollarlo y entregarlo tú mismo, y centrarte en encontrar y vender a los clientes.
4. La gobernanza:
La gobernanza no suele ser algo en lo que se piensa cuando se está haciendo crecer el negocio. Sin embargo, la realidad es que a medida que su empresa crece y tiene más éxito, las implicaciones y los riesgos de una mala gobernanza pueden ser más graves.
La clave de una gobernanza eficaz es contar con las personas adecuadas en las funciones correctas, con las aptitudes y la experiencia adecuadas. El consejo de administración es responsable de la dirección estratégica y de garantizar que la empresa esté bien gobernada. El equipo directivo es responsable de la gestión operativa y de la ejecución de la estrategia.
5. La marca y la reputación:
La marca es la promesa que se hace a los clientes. La reputación es lo que la gente piensa y siente realmente sobre su marca.
El reto consiste en garantizar que la marca y la reputación estén alineadas. La marca debe ser un reflejo exacto de lo que representa su empresa y de lo que la gente puede esperar de sus productos y servicios. Su reputación debe basarse en el cumplimiento de esa promesa.
Cuando su empresa está creciendo, puede ser fácil perder de vista la necesidad de proteger y mejorar su marca y reputación. La tentación es centrarse en la parte operativa de la empresa y dejar que la marca se cuide sola. Sin embargo, la realidad es que su marca y su reputación son sus activos más valiosos y deben ser gestionados cuidadosamente si quiere lograr un crecimiento sostenible.
Los retos del crecimiento son muchos y variados. La clave para superarlos es tener una idea clara de lo que se quiere conseguir y poner en marcha el equipo adecuado, con las habilidades y la experiencia adecuadas, para ayudarle a alcanzar sus objetivos.