Hace tres días, a consecuencia de los huaicos que se produjeron en los caseríos de Santa Rita, Santa Rita Sur y Nuevo Progreso en el distrito de Chaglla, provincia de Pachitea, más de 300 familias quedaron aisladas debido a los derrumbes que bloquean las carreteras vecinales.
Denis Liz Meza Zaravia, pobladora del caserío Santa Rita Baja, mencionó que la población está desesperada porque pese a haber informado a las autoridades de su provincia, no son atendidos con maquinaria para liberar sus vías.
“Los pobladores desde el domingo tratan de liberar las carreteras, pero por la magnitud y cantidad de derrumbes que arrastraron rocas y palos, es imposible limpiar los tramos. Hay riesgo porque se están quedando sin alimentos básicos, algunos niños no pueden asistir a sus colegios y están aislados del centro de salud más cercano a una hora de su localidad”, comentó Meza.
Indicó que mediante un documento solicitaron a la empresa Generación Huallaga de la hidroeléctrica Chaglla, apoyar con maquinaria para la limpieza de la carretera, pero hasta hoy no tienen respuesta.
La población pide a las autoridades atender esta situación de emergencia, enviando maquinaria pesada para remover los derrumbes y despejar las vías de acceso. De lo contrario, cientos de familias seguirán incomunicadas, sin poder abastecerse de alimentos, medicinas y otros bienes esenciales.