La presidenta Dina Boluarte, rechazó la idea de renunciar a su cargo en medio de crecientes tensiones políticas y acusaciones de corrupción. Durante un evento en la provincia constitucional del Callao, Boluarte respondió a las amenazas de una vacancia presidencial, subrayando su determinación de continuar en el puesto hasta el final de su mandato en 2026.
Este pronunciamiento se produce tras el anuncio de que un grupo de congresistas está recolectando firmas para presentar una moción de vacancia por «incapacidad moral permanente», agravada por investigaciones recientes que implican a la mandataria en presuntos actos de corrupción. Además, Boluarte enfrenta críticas por haberse ausentado de sus deberes oficiales durante aproximadamente 12 días, según un reporte del semanario Hildebrandt en sus Trece.
«A mis hermanas y hermanos de Oquendo, a todos los hermanos de la provincia constitucional del Callao, les decimos aquí estamos y nadie nos va a distraer para seguir avanzando en el desarrollo de nuestro querido Perú», declaró Boluarte, enfatizando su compromiso con el mandato electoral y el respeto a la Constitución del país.
La presidenta desestimó las acciones en su contra como maniobras políticas que no benefician al desarrollo nacional: «Basta de caminar contra el pueblo peruano, orquestando situaciones que no conviene al desarrollo del país», afirmó, mostrando su resolución de enfrentar las adversidades políticas sin ceder ante la presión de renunciar.
