Arrestan a dos pobladores por provocar incendio en zona protegida de Carpish

En una rápida intervención, guardabosques y personal del área de Recursos Naturales del Gobierno Regional de Huánuco lograron detener a dos pobladores que fueron sorprendidos provocando un incendio en una zona protegida del Bosque Montano de Carpish, en el distrito de Chinchao. Los responsables, identificados como Isaías Ricardo Romero Templadera y Elvis Sergio Flores Pérez, fueron capturados mientras realizaban quemas ilegales en el sector de San Pedro de Carpish, una de las áreas naturales más importantes de la región.

El incidente ocurrió durante un taller de intervención organizado por la Gerencia de Recursos Naturales en el Bosque Montano de Carpish. Mientras realizaban sus labores de vigilancia, los guardaparques detectaron un incendio que se extendía rápidamente debido a las condiciones climáticas de la zona. Ante esta situación, activaron un operativo de emergencia con el apoyo de la Policía Nacional del Perú y lograron controlar el fuego antes de que se propagara más allá de los límites establecidos.

Afortunadamente, gracias a la pronta acción de las autoridades y de los pobladores que acudieron en apoyo, el incendio fue sofocado antes de causar mayores daños ecológicos. Sin embargo, las consecuencias para los responsables serán severas. Tanto Romero Templadera como Flores Pérez fueron puestos a disposición del Departamento Desconcentrado de Medio Ambiente, donde se iniciarán las diligencias legales correspondientes.

Según la legislación vigente, los autores de incendios en áreas protegidas pueden enfrentar hasta diez años de cárcel por los daños ocasionados al ecosistema. Estas zonas no solo son de vital importancia para la conservación de la biodiversidad, sino que también juegan un papel crucial en la regulación del clima y la protección de fuentes hídricas.

Las autoridades de Huánuco hicieron un llamado a la ciudadanía para que denuncien cualquier actividad que ponga en riesgo la integridad de los bosques de la región. Destruir el medio ambiente es un crimen que afecta a toda la comunidad, especialmente en áreas de alto valor ecológico como el Bosque Montano de Carpish. La intervención rápida de los guardaparques y la Policía evitó lo que podría haber sido una tragedia ambiental de mayor escala, pero se reitera que cualquier intento de dañar estas zonas será perseguido con todo el rigor de la ley.

Las investigaciones continúan, y los detenidos permanecen bajo custodia a la espera de que se formalicen las acusaciones en su contra.