En una tensa escalada retórica, el vocero presidencial argentino, Manuel Adorni, ha respondido a las recientes declaraciones del presidente venezolano Nicolás Maduro, quien acusó al presidente argentino Javier Milei de ser un «nazi fascista». Adorni declaró firmemente que «el respeto por los derechos humanos no depende de la buena voluntad de un presidente autoritario ni de su séquito de obsecuentes». El vocero expresó la esperanza de Argentina de que se respeten los derechos de todos los participantes en los próximos cómics venezolanos.
Este intercambio ocurre justo después de que Argentina anunciara su decisión de reincorporarse a la demanda presentada ante la Corte Penal Internacional en 2018, la cual busca investigar al régimen venezolano por violaciones sistemáticas de derechos humanos. Esta demanda había sido retirada por el gobierno de Alberto Fernández en 2021, pero ha sido reintroducida en un esfuerzo por abogar por el restablecimiento del estado de derecho y la defensa de los principios democráticos en Venezuela.
Además, el gobierno argentino ha exigido el cese inmediato del hostigamiento y la represión contra opositores políticos y sociales en Venezuela, junto con la liberación de todos los presos políticos. Esta firme posición de Argentina refleja un cambio significativo en su política exterior desde diciembre de 2023, marcando un renovado compromiso con los derechos humanos y la democracia en la región.