Más de 105 familias damnificadas es el resultado del fuerte chubasco que afectó por más de 30 minutos la tarde del último viernes al pueblo de Molino, en la capital del distrito del mismo nombre, que sorprendió a propios y extraños por las graves consecuencias generadas con el desborde del río Tirishuanca que dejó incalculables pérdidas a las familias de agricultores cuyas viviendas y predios agrícolas se encuentran en relativa cercanía de la faja marginal, informó el ingeniero Máximo Mayo Advíncula, secretario técnico de Defensa Civil Distrital de Molino. El desborde del pequeño río Tirishuanca se origina por los deslizamientos de los cerros en las partes altas del pueblo que arrastraron a su paso rocas, maleza y árboles que arrasaron con un pontón y afectaron a otro hasta llegar al pueblo y desbordarse en ambas márgenes.
Explicó que la cantidad de material y agua llegó al extremo de hacer colapsar el sistema del desagüe y a la planta de tratamiento de aguas residuales, y bloqueó durante dos horas la carretera de acceso a Panao. Como consecuencia de esta situación han resultado afectados cultivos de pan llevar y animales domésticos como cuyes, gallinas, cerdos y otros que acostumbran criar las familias.
La Municipalidad Distrital, el puesto de salud, instituciones educativas, centro de producción de truchas, el Ministerio Público y varias ONG, también resultaron afectadas con el desborde de las cajas de desagüe de los locales y de las viviendas. Desde las primeras horas de hoy el equipo técnico de la Municipalidad Distrital procederá a evaluar la situación en toda la capital distrital, porque desde el mismo viernes hasta ayer estuvieron ocupados en la evaluación de los daños a los afectados y damnificados.